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En co-autoría con Daniel Reyes León, Martín Gubbins vuelve a sorprender con una muestra que explora los márgenes entre la poesía, la tecnología y el sonido, apostando por nuevos soportes y espacios para su propia obra escrita.  

El sonido del bong rebota en las viejas paredes del Museo de Arte Contemporáneo (MAC) por un par de minutos. El público, expectante desde la planta principal, mira hacia el segundo piso buscando el origen de aquel ruido. El poeta Martín Gubbins y el artista visual Daniel Reyes eran los responsables de dicha intervención, la cual dió inicio a la exposición Cuadernos de composición.

Treinta páginas, dispuestas en diez columnas y tres filas de nudos de hilo encerado, es lo que se puede observar en la pared de la sala catorce del museo. Propuesto como una traslación geométrica de su libro “Cuaderno de composición” (Libros del Pez Espiral, 2014), Gubbins busca que su escritura abandone su soporte original y se muestre en una superficie nueva y amplia, acompañada de aparatos tecnológicos y sonoros de distinta índole. Da la sensación que las líneas de su cuaderno, similares a las de un pentagrama, confluyen entre sí y batallan por su espacio en el blanco muro, mostrándose de algún modo infinitas pero distintas entre ellas.

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Por su lado, Reyes montó un circuito sonoro con tres impresoras Okidata 320, cuyos carros dan voz al texto del poeta al funcionar como cajas de resonancia de su poema visual. Cada dispositivo genera tres tonos al unísono, escuchandose como tres voces impresas en un papel continuo que no acaba nunca y que da pie a la intervención de diferentes artistas invitados.

Alessandra Burotto, curadora de la muestra y coordinadora media del museo, define a Cuadernos de composición como “una estructura narrativa que se ubica en los desplazamientos del medio, en su alteración y en el tránsito de sus signos en las distintas formas del habla, donde la sonoridad —silente o musical— recoge el influjo de la poesía concreta anglosajona para instalarse de lleno en la tridimensionalidad”.

Cuaderno de Composición (Fuente: Martín Gubbins)

Esta sesión inaugural contó con la participación de la cellista Isidora Edwards, el guitarrista Tomás Gubbins y el dúo Montenegrofisher (Luna Montenegro y Adrián Fisher), artistas que realizaron diferentes improvisaciones al ritmo de las máquinas presentes. La muestra contará con cinco conciertos de cámara dentro de la sala, en donde participarán tanto músicos como artistas visuales, poetas y performers.

«Gubbins busca que su escritura abandone su soporte original y se muestre en una superficie nueva y amplia, acompañada de soportes tecnológicos y sonoros de distinta índole».

La exposición estará disponible en el segundo nivel del museo desde el 20 de noviembre del 2018 hasta el 12 de enero del 2019. Los conciertos se extienden por una hora, además de tener una conversación posterior. Para mayor información, ingresa aquí.