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El pintor chileno Roberto Matta, nació en Santiago de Chile el 11 de noviembre de 1911. En los inicios de su carrera artística, sus obras reflejaron sus preocupaciones metafísicas y la importancia de las creaciones religiosas. Su formación como artista, se inició en los Talleres Libres de la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile, donde fue alumno del pintor Hernán Gazmuri.


Sus dibujos figurativos iniciales fueron evolucionando hacia la abstracción. Tomó como referencia a los artistas europeos que estaban en boga: Salvador Dalí, Pablo Picasso y el Greco. Sus obras estuvieron cargadas de humor, erotismo, y reflexión desde sus inicios.

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Matta, desde los años treinta hasta el día de hoy, fue destacado partícipe del movimiento surrealista pero también un personaje decisivo en el grupo del expresionismo abstracto en los años 40. Definió su vocación artística en 1937 al conocer al inglés Gordon Onslow-Ford, quien lo estimuló a pintar. Una vez que inició su carrera, fue incluido en el movimiento e invitado a participar en importantes exhibiciones.


En 1939 viajó a Nueva York. Así, su trayectoria siguió creciendo por insertarse en los más destacados circuitos del arte. De tal manera se hizo conocer y empezó a ganar lugar entre artistas como Marcel Duchamp y Jackson Pollock, representantes de la vanguardia norteamericana. Fue el inicio de una intensa actividad en ese país la que pronto se tradujo en el reconocimiento.

Roberto Matta ha destacado como el último surrealista y uno de los más importantes artistas del siglo XX. Recibió altas distinciones internacionales. Sin ir más lejos, el gobierno de Chile le otorgó el Premio Nacional de Arte en 1990.

Murió en la antigua ciudad de Tarquinia, Italia, en el año 2002.