Skip to main content

“El Esplendor de la Noche”, título de la exposición, nace de las costumbres del pintor chileno Guillermo Lorca. La colección de seis pinturas estará disponible por cerca de un año a pasos del Museo de Picasso, en el nuevo Museo Moderno Contemporáneo. En dos salas de este, Lorca estará presentando sus obras, la mayoría realizadas durante la pandemia que continúan con su estilo realista y mágico. 

Moco Museum, ubicado en Ámsterdam, abrió  su segunda sede en Barcelona el 16 de octubre de 2021 con el compromiso de exponer obras icónicas de autores conocidos internacionalmente y de artistas en pleno crecimiento. Allí se encuentran las obras de Guillermo Lorca, el destacado pintor nacional que comenzó a tomar relevancia en Chile tras las obras «Rostros del Bicentenario» (2010), en la estación de Metro Baquedano en Santiago.

Uno de los elementos más llamativos es el resto de muestras que se encuentran en el museo, artistas de renombre como: Andy Warhol, Jean-Michel Basquiat, Banksy, Salvador Dalí, Damien Hirst, Keith Haring, KAWS, Hayden Kays, Yayoi Kusama, David LaChapelle y Takashi Murakami entre otros, además del arte inmersivo digital de teamLab con Les Fantômes y Studio Irma y el espacio dedicado al fenómeno NFT.

Esto es un sueño hecho realidad sobre todo por dialogar con artistas contemporáneos que no sean solo en la faceta del arte figurativo. Esa tensión que se produce me parece muy interesante”, expresa el pintor.

«El Aterrizaje», por Guillermo Lorca. Óleo sobre lienzo, 2019.

Lorca, una de las jóvenes figuras de la escena artística nacional, usa como fuente de inspiración tanto a clásicos artistas como Rembrandt y Diego Velázquez, la naturaleza, películas y el arte japonés entre otros. En lo que concierne a la técnica, el óleo y el acrílico son sus mejor aliados a la hora de plasmar sus creaciones.

“La selección de los cuadros fue sobre cuáles podrían dialogar mejor para poder crear una sensación envolvente y que uno no pudiese salir de la exposición indiferente si no que tocara distintas fibras sensibles. La exposición habla de la violencia, la naturaleza, la ternura, del erotismo, hasta en algunos puntos del amor. Hay varias temáticas e incursiones profundas que intento tocar a través de distintos elementos simbólicos”, comenta Lorca. 

«La Curandera», por Guillermo Lorca. Óleo sobre lienzo, 2020.

Sin Categorización

Guillermo cuenta a Arte Al Límite que, en la exposición disponible cerca de un año en Barcelona, se encuentran pinturas que recogen sus últimos avances en la pintura. «Ha sido una evolución de lo que he estado pintando los últimos diez años. Es simplemente que el imaginario va avanzando, se va retroalimentando, y va creando distintas escenas y esta especie de diario de vida del inconsciente. Entonces llega un punto en que van llegando las imágenes a mí de alguna forma, mientras voy trabajando, y yo siempre sigo esa línea».

También comenta que no le gusta tratar de definir su trabajo bajo parámetros que lo limiten, pues persigue la autenticidad en sus obras. «Las categorías son complicadas. Yo generalmente no intento categorizarlo, uno intenta hacer una obra de autor. Yo ocupo pintura, claro, pero tampoco soy parte de ningún movimiento en específico ni nada del estilo hasta donde yo sé» comenta entre risas.

Si bien es cierto que muchos artistas buscan provocar distintas emociones o sensaciones en quienes admiren sus obras, está claro que no son dueños de esas emociones en los otros, y que una representación bien puede variar en los ojos del artista como del público. Lorca está convencido de que sí o sí, «lo importante es que el cuadro transmita algo». Reconoce que él no puede saber qué transmite su arte, «eso lo puede saber el espectador no más… yo tampoco puedo controlar lo que puede transmitir el cuadro».

«El Encuentro», por Guillermo Lorca. óleo y acrílico sobre lienzo.

Guillermo encuentra que la dificultad mayor radica en que mientras se trabaja un cuadro, lo que le transmite a él como artista puede cambiar: «Se te ocurre la idea y te transmite algo eso, pero después pintas el cuadro y te transmite otra cosa, y de repente uno se acostumbra al estar mirándolo mucho y después ya no te transmite nada, entonces…  pasan los años y te transmite una cosa diferente».

Sobre la exposición «El Esplendor de la Noche», comenta que el nombre proviene de sus hábitos creativos, pues la mayoría de sus cuadros los hace en la quietud y tranquilidad que otorga la noche. La muestra en Barcelona le ha significado una alegría especial, pues además de poder conocer mejor la ciudad, «lo hace sentir orgulloso, se siente que se ha avanzado un trecho» en su carrera, e implica que su esfuerzo «ha valido la pena».

Además, cree que es positivo desde muchos ángulos el hecho de que aquellas seis obras estén entre el trabajo de otros destacados artistas. «En este museo ha sido muy interesante el diálogo con los otros artistas que hay en el museo, muchos otros artistas de peso pesado… creo que se da un diálogo interesante». Sin duda, un paso más en la carrera del pintor nacional que deslumbrará al público europeo durante gran parte del 2022; un panorama imposible de perderse en caso de pisar suelo español dentro de las próximas semanas.

Sala de exposición en el Nuevo Museo Moderno Contemporáneo (Moco) en Barcelona.