Casa de muñecas se presenta en M100, mezclando video y teatro en una técnica, que con la utilización de la cámara que edita en vivo la imagen y la proyecta en el fondo de la escena, genera un desdoblamiento de la acción que da cuenta del trabajo de dirección para utilizar a los personajes de la obra como muñecos dentro de una casa llamada escenario. Lo que el público no advierte es que también son parte de este juego de títeres. Funciones hasta el 24 de noviembre.
“Mostrando las muñecas del pesebre navideño: un niño dios, una vaca, un jabalí, un perro negro con un pañuelo rojo en el cuello”
La historia de Nora (Nicole Waak) y su marido son bien conocidas por muchos espectadores de teatro, pues el texto de Ibsen es de una potencia que sigue vigente a 140 años de su estreno. ¿Se actualiza en cada matrimonio que pasa por dificultades o son apuestas como las de esta presentación las que mantienen viva la obra? En el marco tradicional los actores representan el texto sobre el escenario, desplegando la narración sobre los intentos de Nora por hacer de su marido alguien respetable aunque no sepa los esfuerzos secretos que ella hace para que los errores de Torvaldo (Juan Pablo Troncoso) no les cuesten la posición que anhelan. En el marco contemporáneo, se construye una segunda narración a través de las cámaras de video que pasean por el escenario. En un momento el matrimonio discute frente a frente, ambos tienen cámaras a sus espaldas que registran sus expresiones y las agigantan para la proyección que cubre el fondo del escenario. Un juego se swicht televisivo, de recursos cinematográficos que hace al espectador concentrase en el fondo de la casa y no en mirar a los actores. Esto pasará la cuenta cuando comience la edición en vivo de lo que sucede en escena, por ejemplo: Nora se recuesta en la cama para contestarle a Torvaldo, la enfocan de forma cenital desde los pies del catre, luego, ella se levanta, pero en la proyección Nora sigue sobre las sábanas, en un plano que comienza a asemejarse a la escena de las rosas de American Beauty. ¿Cuándo se da cuenta la audiencia que la actriz se encuentra en otro lugar, que la acción abandonó las pantallas para suceder en vivo y en directo sobre el escenario? Esta es la metáfora que azota a la generación de los smartphones: la vida no está en las pantallas.
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Retrocedamos un poco y miremos las primeras escenas. El matrimonio conversa sobre la futura celebración de navidad, el amigo que hospedan, Ranky ( José Manuel Aguirre), se pasea semi desnudo frente a Nora para provocarla, a pesar de que ellos lo acogen en su casa después de su divorcio. Para esta puesta en escena se han potenciado las referencias sexuales, explicitando que el chantaje puede ser más potente cuando se involucran secretos sexuales que cuestionaran de manera profunda la base del matrimonio. Como resultado vemos a una Nora tan sensual y empoderada como la . Entre tanto, la cámara se pasea por la decoración de la casa, mostrando las muñecas del pesebre navideño: un niño dios, una vaca, un jabalí, un perro negro con un pañuelo rojo en el cuello. El dispositivo accede a donde los ojos de la audiencia no pueden, inmiscuyéndose en detalles, recreando accidentes automovilísticos con juguetes de plástico, situándose entre las piernas de la protagonista mientras rechaza los avances de Ranky. Es parte del interesante diseño multimedia desarrollado por Pablo Mois.
«Europa: nieve y guerra. No como nosotros que vivimos en este oasis”
Con una mirada exterior, la escena teatral nacional ya presentó durante este año una propuesta que dialogaba de manera transgresora con Casa de Muñecas, hablamos de (estrenada en teatro U. Mayor), obra que al momento de reseñarla en Arte Al Límite, mencionamos que estaba “escandalizando la Casa de Muñecas” ¿Por qué? Porque en uno de los cuadros de Demasiada Libertad… hacen la recreación de la escena final de este clásico, donde Nora era interpretada por un travesti y Torvaldo por una mujer usando un arnés sexual. La inversión de géneros y roles sexuales es un desafío a la familia tradicional que cuestiona Ibsen en su texto. En este montaje que se presenta en M100, es la mezcla del género teatral y cinematográfico lo que genera un efecto fresco, nuevo, renovador. A esto hay que sumar la película –el falso documental- que filma Ranky en base a las discusiones del matrimonio que lo aloja. La obra se cuestiona a sí misma desde el cine y a la vez poniendo en duda la veracidad de lo que se filma tanto en la ficción como en el documental. Volvemos a lo que sucede en escena: se registra lo que pasa sobre las tablas, pero la edición evidente de ciertos cuadros habla de una manipulación de la narración que se explícita y discute para que la audiencia cuestione el alcance de la mediación entre la obra y su mirada.
«-Torvaldo: Si tú me dejas me mato, tomo veneno
-Nora: Ay, amor, qué hermoso»
Cerramos apreciando el momento previo al comienzo de la obra, Nicole Waak de pie en escena, diciendo “la gente se acercará luego de la obra a preguntarme qué pasa con Nora después de que cruza la puerta, yo no tengo la respuesta, Nora no existe, yo soy solo una actriz”. Nora no existe pero cobra vida sobre las tablas desde hace más de 100 años, perfilándose como una de las figuras femeninas más fuertes del teatro. Vigente y con funciones en M100 que adhieren al programa Paga lo que puedas, Casa de Muñecas tiene presentaciones hasta el 24 de noviembre.
Casa de muñecas es una co-producción entre Colectivo Zoológico y Matucana 100, financiada por Fondart Nacional 2019. El proyecto además fue parte de una residencia artística los meses de abril y mayo de 2019, en Watermill Center de Nueva York, prestigioso centro de creación dirigido por Bob Wilson.
Coordenadas Casa de Muñecas
16 al 24 de noviembre
sábados y domingos, 12.30 h y 17 h
Los tickets para las funciones del programa “Paga lo que puedas” tienen un valor de $2.000, $4.000 y $6.000, con la opción de solicitar entradas gratuitas en Boletería (presencial).
Sala principal, Centro Cultural M100
Matucana 100, Stgo.
Ficha artística
Dramaturgia: Henrik Ibsen
Adaptación: Juan Pablo Troncoso
Dirección: Laurène Lemaitre y Nicolás Espinoza
Elenco: Nicole Waak, Juan Pablo Troncoso, José Manuel Aguirre, German Pinilla
Diseño multimedia: Pablo Mois
Diseño integral: Laurène Lemaitre
Realización escenográfica: Amorescénico
Sonido: Diego Betancourt
Foto afiche: Ültraestudio
Producción: Paula Pavez y Nidia Vargas
Prensa: Claudia Palominos
Compañía: Colectivo Zoológico