Edith Meusnier es una artista ambiental francesa, donde su trabajo con cintas de plástico sale de la esfera privada para registrarse en el espacio colectivo, y desde ese momento ella es reconocida por su “Paysages d’artificio”. Su obra llena de seducción, efímera y artificial, es instalada en espacios donde la gente transita. Parques, castillos, claustros de monasterios y patio de los museos, ya que puede ser frágil para la ciudad. Sus instalaciones, en la confrontación con los sitios ambientales, constituyen un ambiente paradójico y aleatorio que cuestiona las nociones de sostenibilidad y vulnerabilidad. El sol y la lluvia aumentan los efectos de transparencia e ilusiones, tratan de dar la forma de una trampa, pantalla o ventana, la idea es que nunca se congelen, y vibren entre la luz y sombra.