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Perfil

Rosario Vásquez Mira | “Somos esclavos del constante movimiento que nos obliga a vivir”

By 15 de diciembre de 2015septiembre 12th, 2024No Comments

es una artista chilena, especializada en pintura en acuarela, óleo y grabado en punta seca. Tuvo diversos intereses, entre ellos la música, la danza y la literatura, antes de decidirse definitivamente por el camino del arte plástico y pictórico.

Imágenes cortesia del artista.

El interés surgió de la necesidad de expresar sus sentimientos, de dejar una huella a través del proceso creativo, materializando sus ideas de forma única. “El proceso creativo me hace feliz: el partir de una experiencia o sentimiento, que puede parecer para muchos insignificante, y transformarlo en una idea que luego se materializa en un producto original y único, para así capturar atención y hacerlo relevante”, explica.

Cursó sus estudios en la Pontificia Universidad Católica de Chile, graduándose en Licenciatura en Arte y Humanidades y doble Major en Expresión Artística y Literatura. Ella describe su paso por la universidad como fundamental para su desarrollo como artista, pues aprendió sobre diferentes soportes y técnicas. Rosario ingresó al Collage de Arte y Humanidades, donde descubrió diversos métodos de aplicación artística, decidiéndose a continuar el camino de artista visual. “La Licenciatura en Arte y Humanidades me dio las herramientas necesarias para poder desarrollarme como artista y poder enriquecer ese proceso con estudios interdisciplinarios”, cuenta. La interacción con sus profesores en la escuela de arte le permitió aprender y mejorar sus habilidades plásticas; asimismo, complementó su aprendizaje con estudios en la escuela de Literatura y Letras de la misma universidad, instancia que, según comenta Rosario, “me enseñó a cuestionar, reflexionar y pensar”.

© Rosario Vásquez Mira

© Rosario Vásquez Mira

La artista está constantemente viajando, algo que sus padres siempre le inculcaron, especialmente para aprender de otras culturas, a no temer a lo desconocido, enseñanzas que crearon su gusto por viajar, conocer personas, sociedades y creencias diversas, siendo ésta la razón por su interés en realizar diferentes Residencias Artísticas. Lo anterior se ve plasmado en su obra, tanto las representaciones de los cuerpos como los rostros parecieran estar en un constante movimiento, de la misma forma, las paletas de colores pareciera que otorgaran mayor dinamismo y frescura a las figuras, desvinculándose del carácter estático de la obra de arte clásica y estática.

“El movimiento en mis obras no es casual. Para mí el movimiento lo es todo. Somos esclavos del constante movimiento que nos obliga a vivir. Por eso a la hora de representar experiencias necesito que mis obras se muevan, que hablen, que sientan, que sean orgánicas, que estén vivas, que cuenten una historia”.

Es debido a esta experiencia de siempre estar viajando, que su opinión sobre cómo la sociedad chilena valora el arte es firme, a su parecer el problema recae en la ignorancia, pues no se ve al artista como un profesional, alguien que estudió en la universidad y tiene un título profesional, lo que trae consigo los prejuicios sobre la labor del artista, la cual se la caricaturiza como poco rigurosa. “El trabajo del artista y la representación de realidades, culturas, experiencias y emociones para lograr reflexión ES RELEVANTE para la sociedad”.

Por otra parte, ella comenta que el círculo artístico es muy elitista, porque suele suceder que para darse a conocer, hay que pagar, algo que no todos los artistas pueden hacer. Además, Rosario también recalca la importancia de la educación artística en los colegios, y que en los programas de arte de éstos exista educación sobre el arte chileno, para crear conciencia sobre la labor y la importancia de los artistas nacionales.

© Rosario Vásquez Mira

© Rosario Vásquez Mira

Por otro lado, Rosario también tiene un fuerte interés por el voluntariado y la educación, especialmente la educación en sectores de riesgo social y países donde gran parte de la población vive en situaciones de bajos recursos. Es por esto que en el 2014 Rosario participó como profesora de arte en un voluntariado en Guatemala, y comenta que es en las sociedades donde hay más falencias sociales que nace una gran necesidad de educación. Y son los niños quienes se han visto más beneficiados con estos programas de voluntariado: “Los niños a los que yo enseñaba en Guatemala venían al centro por voluntad propia, los menores hasta de solo cuatro años. Al ser muchos de ellos primera generación de letrados de sus familias sabían que la única forma de hacer sus tareas si necesitaban ayuda era en el centro. Iban porque querían saber más. Poder ayudar a enriquecer la educación de esos niños a través del arte ha sido la experiencia más gratificante de mi vida”.

Ese mismo año, desarrolló su obra en el Taller K, estudio de Grabado, ubicado en Santiago de Chile, donde incursionó en la técnica de punta seca y el entintado a lapoupée, experimentando y logrando nuevos resultados en sus impresiones.

En enero del 2015 Rosario mostró sus obras en la Galería Oops!, con una exhibición llamada Desconexiones y Conexiones, para posteriormente trasladarse a Australia donde presenta sus obras y también trabaja en un proyecto con el Tanks Art Center, en la ciudad de Cairns, donde se ha enfocado en desarrollar un proyecto sobre cómo los niños se relacionan e interactúan en un parque llamado Goomboora Park.