La abstracción geométrica es un estilo artístico cuyas bases vienen del arte abstracto, y se ejecuta mediante la manipulación, deformación y reinterpretación de las figuras geométricas, otorgándoles así una nueva y renovada manera de comprender su visualidad. Desfigurar un cuadrado o un triángulo no es un acto que se haga arbitrariamente, debe existir cierta predeterminación y la conceptualización de lo que se busca componer, es por ello que requiere de previo análisis y experimentación. Las formas geométricas son elementos caprichosos y para que funcionen en armonía, se debe tener una pre-concepción del tema y el proceso. María Bobillier parece comprender esto perfectamente, pues es capaz de manipular las figuras geométricas con una habilidad excepcional, jugando con colores, líneas y combinaciones.
En sus series Doble Curva o Curva Recta, estamos frente al ingenio y creatividad de la artista, por ejemplo en sus obras DC4 y DC6 presenciamos no solo la manipulación de la figura, también la combinación armónica de la paleta cromática con un drástico cambio hacia la monocromía. Por otro lado, sus series de fotografías denominadas CRONO-GRAMA, Bobillier va más allá pues se dedica a explorar con la profundidad, la curva, la extensión de la línea, subiendo un escalón en la experimentación con la figura geométrica.
El trabajo de María Bobillier se destaca gracias a su novedosa incursión tanto en el soporte como en técnica y proceso de creación de sus obras.