Skip to main content
PerfilPortada

Jesús Hdez-Güero | “Si el arte no transforma directamente la realidad, sí modifica e incentiva a que las personas lo hagan”

By 21 de octubre de 2016septiembre 12th, 2024No Comments

{:es}

Jesús Hdez-Güero no trata de narrar historias con sus creaciones pero sí intenta de “historizar lo que nos historiza”, como explica. Al artista le interesa más el cómo que el qué, esto debido a que cree que el “arte no debe ser anecdótico, ni contar historias, sino conceptualizar sobre cómo se ha narrado y se narra la realidad y su historia o ‘las historias’, y qué hacemos con ella. Si somos realmente los que narramos y hacemos la historia, o simplemente, estamos siendo narrados por ella”, aclara.

Desde que tiene uso de razón, Jesús, ha estado sumergido en el espectro del arte. Siempre dibujó, pero no tiene consciencia de cuándo empezó. Por lo mismo, cree que el arte lo escogió antes de que él pudiera hacerlo. Su querida abuela fue la única capaz de hacerle entender –cuando tan sólo tenía 9 años– de que estaba atrapado por el arte y desde ese minuto supo que ser artista era una posibilidad tangible y que era una profesión, por ende, “una responsabilidad”. Hoy este mundo es su vida.

Jesús Hdez Güero

Tener la culpa. Instalación / Bandera venezolana (150 x 90 cm), asta de bandera en hierro negro, cordel (driza) y base de concreto. Caracas, 2013-2014. 500 x 200 x 100 cm

Se formó en la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro y en el Instituto Superior de Arte (ISA) en su natal Cuba. En ambas escuelas la experiencia fue intensa y Jesús decidió asumir estas dos etapas con un nivel de seriedad y empeño singular. En San Alejandro tuvo un período más vivencial del proceso de aprendizaje, esto debido al afán que tenía de adquirir un oficio mediante la aprehensión de la técnica: el grabado. “La precisión y la limpieza dentro de mí práctica creativa se hizo una obsesión. Todo surgía desde una fluidez total, con un impulso y ritmo vertiginosos. Era más intuitivo y menos racional, conceptualmente hablando”, señala.

Por otra parte, durante su posterior etapa en el ISA y sus estudios paralelos en la Cátedra de Arte de Conducta –impartida por Tania Bruguera–, las preocupaciones artísticas eran menos técnicas y más conceptuales; Jesús tuvo que reflexionar sobre cómo abarcar una fuerza conceptual en sus propuestas y un alcance más amplio a nivel social. El espacio se empezaba a presentar como una plataforma de expansión para desarrollar preocupaciones socio-políticas, que venía arrastrando como individuo y que solo procesaba a nivel de pensamiento. “Entones, mi práctica se volvió menos intuitiva, más consciente y crítica. Áspera…”, dice el artista.

Jesús Hdez Güero

Minutos de odio contra sí mismo. Video / Ocho disparos sobre bandera, 01:11 min. 2014-2015. Colección Brillembourg Capriles, US.

Jesús tiene una sensibilidad relacionada al poder, la violencia y las memorias la cual “nace de ser parte de un país víctima de la politización, la violencia psicológica y la historia como discurso mediático de poder. De un contexto en el que cualquier pensamiento posible, es imposible en sí mismo de no ser politizado”, describe. De modo tal que dicha sensibilidad adquirida y desarrollada por defecto es algo de lo que hoy ya no se puede librar y es improbable que llegue a hacerlo, lo que provoca que se explicite en cada nuevo trabajo que crea y que probablemente esté presente en Una Nación en pocas palabras, obra en la que actualmente trabaja el artista la cual tendrá dos versiones. Una de ellas ya está terminada.

Jesús Hdez-Güero busca hacer del arte un fenómeno social. Donde se replantee, reestructure y reorganice los patrones culturales y de comunicación; de intercambio y relaciones sociales existentes; llevándolas a otras formas posibles o a otras posibilidades de comprensión, utilización y vivencia de la realidad misma. “Si el arte no transforma directamente la realidad, sí modifica e incentiva a que las personas lo hagan o comiencen a cambiar la manera de percibirla, interpretarla y convivirla. Y ahí se encuentra el valor real del arte como hecho social en sí mismo, y mi intención dentro de este”, concluye Jesús.

Para adquirir y conocer más sobre Jesús Hdez-Güero, haz clic acá.

{:}{:en}

Jesús Hdez Güero doesn’t try to narrate histories with his creations, but he tries to “become history what become us history,” as he explains. The artist is more interested in how and not what, because he thinks that “art mustn’t be anecdotal, or tell stories, but conceptualize about how it has been narrated, and how it narrates reality, and it historia or historias, and what do we do with them. If we really are the ones that narrate and do history, or we are just being narrated by it,” he clarifies.

As far as he can remember, Jesus has been immersed in the art spectrum. He always drew, but he doesn’t have memories of his beginnings. For that reason, he thinks that art chose him before he could do it. His dear grandmother was the only person to drum him into, when he was 9 years old, that he was caught by art, and since that minute, he knew that to be an artist was a tangible possibility and a profession, thus, “a responsibility.” Today, this world is his life.

He was trained in the San Alejandro National Academy of Fine Arts and the Superior Institute of Art (ISA) in his native Cuba. In both schools the experience was powerful, and Jesus assumed the two phases with a unique level of seriousness and determination. In San Alejandro, he had a more existential phase of the learning process, due to the ambition he had of acquiring an profession by means of the understanding of the technique: the printmaking. “The accuracy and cleanliness in my creative practice was an obsession. Everything appeared from a total fluency, with a vertiginous impetus and rhythm. I was more intuitive and less rational, conceptually speaking,” he says.

For other part, during his following phase in the ISA and his parallel studies in the Behavior Art School –given by Tania Bruguera–, the artistic worries was less technical and more conceptual. Jesus has to reflect about how cover a conceptual force in his proposals and how to cover a social-wider range. Space began to turn  up as an expansion platform to develop socio-political worries that were led as individual and that just processed in thinking level. “So, mi practice became less intuitive, more conscious, and critic. Rough…,” says the artist.

Jesus has a sensibility related to the power, the violence, and the memories, which “is born of being part of a country victim of politicization, psychological violence, and history as a media speech of power. Of a context in which any thought possible is impossible in itself if it’s not politicized,” he describes. In such a way that this acquired and developed sensibility is by default something that today cannot be done (and improbable to be done,) which makes explicit in each new word that he creates and that probably will be present un Una Nación en Pocas Palabras, artwork that the artist is now working on, which will have two versions. One of them is already finished.

Jesus Hdez Güero wants to do art a social phenomenon where cultural and communicational patterns were raised again, restructured, and reorganized; pattern of exchange and existing social relations, carrying them to other possible forms or to other possibilities of comprehension, using, and experience of the same reality. “If art doesn’t directly transform reality, it does modify and encourage people to do it, or to begin changing the way of perceiving, interpreting, and living with it. And there, the real value of art is found as a social fact in itself, and as mi intention within it,” Jesus concludes.

To acquire and know more about Jesus Hdez Güero, click here.

{:}