Nacido en Eslovaquia en 1924. A la edad de 4 años se mudó a la Argentina para quedarse definitivamente. El arte fue su aliado desde pequeño y con él, transitó por un sinnúmero de academias cursando talleres para mejorar la técnica y descubrir experimentalmente los efectos de la creación y sus virtudes.
Rehuyó del realismo a como de lugar. Nunca creyó en el arte como medio para representar la realidad misma a modo de legado pictórico, por el contrario, se alejó de esos rumbos y caminos para adentrarse en a profundización y el estudio de la plástica y la materia de manera conceptual.
Muchas veces confesó que su ambición era transformar el mundo en que vivía y contribuir con él activamente a través de la experimentación matérica y poética… y lo consiguió. Luego de 92 años luchando por estos ideales, dejó la tierra y sus huellas con ferviente presencia no solo en el pueblo argentino, sino en los amantes del arte contemporáneo vanguardista en el mundo entero que admiran el arte cinético.
Fue en Buenos Aires. Su deceso se produjo en la misma ciudad donde el artista, años antes, específicamente en 1946, fundara el Movimiento Madí. Dicha agrupación trabajó incansablemente para someter a la mente a desafíos y juegos perceptivos, la idea siempre fue estar alerta, descubrir en los elementos básicos y sustanciales de la vida una forma discursiva, la liberación de la materia.
Trabajó el cinetismo. Siempre enfocado en el movimiento implementó fórmulas para agregar en sus piezas luz y gas neón. Todo lo que se encendiera y apagara, creara contraste y sombra y produjese una sensación de desenfoque y movimiento llamaba poderosamente su atención. Gustaba de hacer trabajos de interacción con el espectador. A través de interruptores, botones y sonidos hacía partícipe al espectador de sus obras y lo volvía un participante más de ellas, un participante indispensable para que funcionasen.
EL AGUA
«El agua y la lluvia van adheridos a mi nombre»
Gyula Kosice
Otro de sus grandes deleites fue el agua. El material, su cualidad de fluido, la forma en que genera reflecciones, movimiento continuo, flujos y corrientes, hicieron que su creatividad y fijación se movieran en esa dirección y, prácticamente, nunca la dejara. Fue casi una obsesión experimental, una fijación de placer artístico. Ciudad Hidroespacial fue su proyecto cúlmine y el más destacado y reconocido de todos. En ella el artista hablaba de la forma en que el mundo se estaba sobrepoblando, sosteniendo, al tiempo, un mensaje plástico, otro estético y otra arista poética.
LA LUZ
Reanudado (fragmento)
Este instante de una duración ardiente
se multiplica en los sostenes del aliento
en la asimilable hegemonía de la realidad
ya vuelvo
más claro?
échele Kosice.Buenos Aires, 1944
El arte cinético y lumínico lo trajo el mundo y se lo llevó. Como exponente y aficionado a su pasión, nunca dejó de hacerse preguntas ni a maniobrar con estos elementos, llegó con la utopía y se fue con ella luego de que una neumonía lo internara en un hospital porteño donde pasaría sus últimos días de vida. Plexiglás, aluminio, acero inoxidable, todos formaron parte del legado que deja y que quedará inmaculado hasta la eternidad.