Escultora alemana. Se dedica al papel y a la tridimensionalidad, creando verdaderas cuevas de papel rasgado, en los que pliego tras pliego, el juego de capas consigue un efecto visual degradé que gracias a la profundidad y la manufactura, se hunden hacia el infinito sin exhibir el final que se oscurece.
Cada capa dialoga con la anterior complementándola y volviendo su importancia, respecto de la anterior, el vínculo que da continuidad a cada recoveco, rincón y escondite que se forma entre sus espacios. El poder que adquiere la luz en este trabajo consigue que los túneles y sus rincones escondan algo que el espectador tiene la misión de descubrir.