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¿Qué tiene en común Donald Trump, una oveja y un chancho?

By 1 de abril de 2016septiembre 10th, 2024No Comments

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Sin dudas la carrera presidencial de Donald Trump, es uno de los acontecimientos más polémicos del último tiempo en Estados Unidos y a nivel mundial. Y sí, hay que decirlo, el personaje de Trump ha hecho a muchos recordar, las películas de los años cincuenta cuando el presidente más que demócrata parecía un dictador revolucionario tratando de recuperar la confianza de los más conservadores de América. Esto no solo ha suscitado que existan retratos parodiando por doquier al candidato republicano Donald Trump, sino también ha despertado el arte a la basura del artista y activista James Ostrer.

James Ostrer es un artista que en su infancia y como la de muchos niños de los años noventa, vivió gran parte de su fin de semana visitando el local más grande de comida rápida: McDonald’s. Su relación con la comida chatarra lo llevó no sólo a una adicción a ella cuando adulto, sino que también a explorarla desde un punto de vista artístico y funcional. Creando obras que representan la figura humana conformada por la monstruosa comida que venden en las grandes cadenas de comida rápida o en supermercados como la gelatina, el azúcar, chocolate, carne y otros componentes, James logra que sean lo más parecida a la visión zombie más pop del ser humano.

Pero ¿qué tiene que ver James con Donald?

No. No es sólo un juego de palabras parecido al McDONALD‘s, sino que es la nueva exposición de retratos del artista en Hong Kong, titulada The Ego System. La muestra que usa celebridades o personajes que estén conformados de basura en sus rostros o cuerpos, tiene a uno muy particular en su listado: Donald Trump.

La idea de crear un ícono visual y reflejar la megalomanía de estos personajes está llena de referencias a productos que se encuentran en el supermercado y también a desechos como escombros o sustancias como el petróleo. En el rostro de los personajes es común encontrar productos como la carne, es más, los ojos del candidato presidencial son ojos de una oveja para reflejar que «el mundo tiene los ojos puestos en Trump»El petróleo que sale de su chaqueta o los escombros que pintó de dorado para referirse a su gran imperio de edificios, tiene relación con el futuro fantástico que promete a los estadounidenses. Y la cabeza de chancho es una referencia a George Orwell en la granja de los animales.

© James Ostrer

© James Ostrer

El hombre de negocios, narcisista, heredero de una gran riqueza y que tiene a los estadounidenses enganchados con el futuro económico que les espera, es lo que el artista define para él como «un multimillonario que perdió más de lo que se ha ganado a través de opciones comerciales que fracasan y al mismo tiempo un vocero para fomentar aún más la brecha racial en la humanidad».

The Ego System cuestiona la idea de nuestras referencias modernas y sobre el concepto de celebridad, que no es lo que parece ser. Crear estas figuras fue una especie de terapia para el artista, un proceso que utilizó para descargarse del sistema y de la información que tiene día a día, y también obviamente para seguir trabajando en lo que James Ostrer considera uno de sus mayores proyectos: ayudar a niños que están metidos en este mundo tan comercial.

James Ostrer actualmente ayuda a que niños y padres eviten la comida chatarra en su fundación.

© James Ostrer

{:}{:en}Without doubt the presidential race of Donald Trump is one of the most controversial event of the last time in United States and around the world. And yes, we have to say it, the character of Trump has makes to remember the 50’s movies, when the president more than democratic seems a revolutionary dictator trying to recover the trust of more conservative Americans. It has caused that exist portraits’s parody of republican candidate Donald Trump and also has inspire the creative reuse by the artist and activist James Ostrer.

James Ostrer is an artist who lived his childhood as 90’s children, he spent his weekends in the most bigger fast food McDonald’s. His relation with junk food take him to an addiction when he grow old, and also it takes him to explore from a artistic and functional point of view. Creating works that represents the human figure conformed by monstrous food that is sold in the large fast food chains or in supermarkets such as gelatin, sugar, chocolate, meal and others, James reaches that these be the most similar to zombie vision most pop of human being.

But, What is the relation between James and Donald?

It is not just a pun seem McDONALD‘s, but is the new exhibition of artist’s portrait in Hong Kong called The Ego System. The work uses celebrities or characters that are composed of garbage in its faces or bodies, and it has one particular in his list: Donald Trump.

The idea of to create a visual icon and reflect the megalomania of this character is full of references to products that are in the supermarket and also residues as garbage or substances as oil. In the face of characters is common to find products as meal, in fact, the eyes of presidential candidate are eyes of a sheep to demonstrate that world have their attention in Trump. The oil that leaves from its jacket or the residues that he painted of golden color, makes reference to his big empire of buildings, has relation with the fantastic future he promises to Americans. And the head of pig is a reference to George Orwell in Animal Farm.

The businessman, narcissist, heir of a great wealth, has Americans thinking in the economic future that is expected. This is what artist defines as “a multimillionaire who lost more than he has win through commercial options that fails, and at the same time a spokesperson to foment the racial rift in humanity.”

The Ego System questions the idea of our modern references and about the concept of celebrity which is not what seems to be. Creating this figures was a kind of therapy for artist, a process that used to vent  system and venting the information that he has day to day, and also obviously, to continuing working in what James Ostrer considers one of his greatest projects: to help children which are inside of this commercial’s world.

Actually, James Ostrer helps children and parents to avoid the junk food in his foundation.{:}