Una alianza entre el país cuyo renombre conduce al pensamiento a la cuna de la historia, el arte y cuánto más y la Unesco está a punto de iniciar la que se espera sea un fructífera recuperación y esperanza de hallazgos de arte perdido o roído por los desastres naturales o las guerras.
Así es como hoy Italia anunció que pondrá a disposición de las Naciones Unidas un equipo multidisciplinario de expertos para rescatar monumentos, obras u obras de arte que hayan perdido su valor, estén deterioradas o no hayan sido halladas aún por la población en pos de conservar el vínculo y legado que queda de generaciones pasadas y aquello que forma parte de la historia, la evolución de la sociedad y su cultura.
«Los cascos azules» se denominarán. Cada quien reciba uno de estos tendrá por misión acudir a lugares como Palmira -recién destruida en Siria- y trabajar en conservación, búsqueda y reconstrucción de patrimonio puesto en peligro. «En base al acuerdo, la Unesco podrá pedir al Gobierno italiano que ponga a disposición expertos (…) para la conservación del patrimonio cultural que se vea amenazado por crisis», señala la Unesco en su comunicado.
Son 60 profesionales, todos ellos desempeñando una labor que devuelve, en cierta forma, la tranquilidad respecto del valor y la intención de los países de conservar sus reliquias, el arte que les describe, define e interpela y no dejarlo sucumbir ante los restos de un desastre ocasionado también por el hombre.
Todos ellos,enviados a zonas de peligro o ya devastadas, preparadas para operar en casos de emergencia y conscientes de que, en muchos casos, corren riesgo de hacerlo. Serán los rescatistas quienes operen en una primera fase. Luego vendrán restauradores e historiadores del arte a devolverle ala vida a lo que por circunstancias ajenas cayó. Esta iniciativa busca, uniendo aun país con una Organización Mundial replicarse en múltiples partes, y recobrar una labor activa de la ciudadanía por cuidar aquello que les define como tal.