{:es}
Las residencias son una instancia de diálogo y creación entre artistas, curadores y teóricos. Permiten aunar dentro de una experiencia específica la producción de obras dentro de un contexto específico. En este caso, y bajo la tutela curatorial de Aixa Sacco, María Eugenia Cordero (Argentina) y Santiago Rueda (Colombia), Barda del Desierto se concibió para ser una residencia donde la diversidad de perspectivas representase uno de los motores creativos para la discusión del ejercicio creativo de los artistas asistentes. Fue una convocatoria que deseaba integrar a artistas argentinos y latinoamericanos, para desarrollar proyectos artísticos atravesado por la experiencia de habitar un entorno desconocido: el desierto patagónico argentino. En esta residencia participaron ocho artistas de Argentina, México, Brasil, y tres artistas chilenos: Fernanda Barros, Florencia Infante (trabajando en conjunto) y Gonzalo Cueto.
Durante tres semanas se concentraron en trabajar con la resignificación del espacio del “desierto”, contextualizando y poniendo atención a sus características geográficas, rasgos culturales, naturales, sociales e históricos. Destinado a crear diálogos y discusiones entre artistas y curadores, planteando así la oportunidad de creación artística con un objetivo expositivo y teórico: que propone la descentralización de las prácticas culturales, alejado de los centros tradicionales de arte y creación. En este punto también cuestionar qué significa el “desierto” en términos conceptuales de la modernidad contemporánea.
En este contexto la temática de la discusión permitió la posibilidad de exploración de cada artista, poniéndole énfasis a diferentes miradas sobre el concepto de desierto, el significado histórico en que nos encontramos inmersos: dictaduras, políticas neoliberales, brechas sociales, explotación de recursos, etc. La experiencia creativa, es sin lugar adudas un proceso personal de cada artista, pero las residencias se han convertido en una instancia de diálogo importantísimas par
a la interacción y conocimiento de diferentes realidades, en este caso de nuestro continente e idiosincrasia latinoamericana. Generar estos lazos e instancias son importantes para el crecimiento y desarrollo artístico y teórico de nuestra identidad, que en nuestros tiempos ha evolucionado y mutado de las concepciones tradicionales, en un mundo moderno y globalizado.
Más información en Facebook
Fotos cortesía de Marcel Martins, Fernanda Barros, Laura Garduño
{:}{:en}Residences are an instance of dialogue and creation for artists, curators, and theorists. It allows joining, within a specific experience, a production of works within a specific context. In this case, under the curatorial supervision of Aixa Sacco, Maria Eugenia Cordero (Argentina), and Santiago Rueda (Colombia), “Barda del Desierto” was created to be a residence where diverse perspectives represent one of the creative engines for the discussion of creative exercises of assistant artists. It was a call that pretends to gather Argentinian and Latin-American artists to develop artistic projects by means of experience of living an unknown surrounding: Argentinian Patagonian desert. In this residence, eight Argentinian, Mexican, and Brasilian artists along with 3 Chilean ones: Fernanda Barros, Florencia Infante (working together), and Gonzalo Cueto.
For three weeks, they focus on working to modify symbolism of dessert, setting in context and focusing on the geographical characteristic and cultural, natural, social, and historical features. Destined for create dialogues and discussions between artists and curators, setting out the opportunity of artistic creation with an expositive and theoretical objective: which proposes the decentralization of cultural practices, far from traditional centers of art and creation. At this point, they question the meaning of “dessert” in conceptual terms of contemporary modernity.
On this context, the theme of the discussion allows the possibility to explore each artist, highlighting different glances about dessert concepts, historical meaning we are immerse: dictatorships, neoliberalist policies, social gaps, resource explotation, etc. Creative experience is, without doubt, a personal process of each artist, but residences have turned into in a dialogue instance of such importance for interaction and wisdom of deifferent realities. In this case, speaking of our continent and Latin-American idiosyncrasy. To create this bonds and instances is important for the growth and artistic and theoretical development of our identity, which has evolved and mutated on this period when speaking of traditional conceptions in a globalized modern world.{:}