Danisa Glusevic |Materializando los orígenes de la creación

Danisa Glusevic integra el arte a su vida día a día. La naturaleza –palabra que escribe con una N mayúscula–, observa y se hace parte de ella. Allí, integrada en ramas y paisajes de ante cumbres, ve la vida misma. Dice que está todo el arte, es donde todos los ciclos se encuentran, que todo tiene su lugar y colores que podemos percibir gracias a esa creación universal. “El Océano, las montañas, el agua, y muchas formaciones de origen natural representan la belleza, la fuerza, la eternidad, la luz, la sombra, donde el arte está presente y se refleja en cada instante”, asegura la artista.

Esto se relaciona con el arte a través de un lazo único: “cuando estamos en un vínculo con el arte, muchas cosas giran en torno a esto, la vida cotidiana se hace a veces diferente con la mirada artística y todos los pensamientos o acciones tienen otra razón de ser”, reflexiona.

La necesidad de integración lo plasma con ímpetu en sus obras, a través de sus imágenes se puede ver que toda la temática está entrelazada; las gamas de colores se mezclan a la vez armoniosa y firmemente, creando en su conjunto obras abstractas, donde las formas y líneas no tienen límites. “Los límites y bordes son conceptos que expresan y evocan, emociones que son de una motivación propia del ser”, destaca Danisa. No tiene miedo de utilizar variados colores y técnicas como grabado, litografía o pintura para lograr su objetivo. Y la descomposición y oxidación de la materia y forma crean partes importantes de su desarrollo y reflexión para aproximarse al plano emocional y humano.

Grito
Grito

La serie Cangrejos posee este juego de colores –mayoritariamente cálidos– intensos, que buscan formas variadas sin las fronteras impuestas por líneas; en las obras no existe un trazo definido que limite su imaginario, así cada una se transforma en un mundo mágico y absorbente. La artista trabaja la imagen contraponiendo la estructura y la materia, llegando a unir a través de la gráfica los elementos de la pintura. Los elementos que aparecen se confunden con el fondo, haciéndose uno. Con el óleo trabaja con veladuras y empastes, que le permiten visualizar distintos matices. “El dibujo y técnicas de carácter gráfico como el grabado en metal y la litografía, se complementan con la pintura, y el poderoso contraste entre ellos identifica mi visión del arte”, señala la artista licenciada en mención pintura. Para la artista, el grafismo le evoca lo primario y lo anterior al sonido o las vibraciones.

Entre los otros métodos que ha utilizado, se encuentra la cerámica. El contacto con este material la conecta con las raíces del mundo, el arte primitivo y abstracto en su forma más bruta y sublime a la vez. La acuarela la traslada al mundo del agua, la transparencia la acerca al espíritu y a la mirada interior. De esta forma, materia y espíritu complementan su concepto de Arte.

Otro de los motivos recurrentes que la inspiran a crear son las personas. Al respecto, destaca que “personajes como habitantes únicos y anónimos, de regiones desconocidas, son de mi interés particular, la forma como elemento primero, esencial, que se contrapone, componiendo así una superposición de planos y color”.

Ⓒ Danisa Glusevic
Ⓒ Danisa Glusevic

Proyectos y búsquedas de nuevas reflexiones

Danisa estudió Licenciatura en Artes en la Universidad de Chile, fue becada entre 1997 y 1998 en el “Höchschule der Künste” en Berlín, Alemania, lo cual fue una gran experiencia, tanto en lo personal y en lo artístico, que le permitió trabajar en un proyecto en pintura y materiales diversos. Actualmente es asistente de Área de Artes Visuales en Taller complementario de Dibujo y Grabado en Metal en la Universidad de Chile, con la Profesora Verónica Rojas, lo cual ha sido una gran experiencia para apreciar cómo evolucionan las obras de los estudiantes y todos los cambios en sus desarrollos artísticos.

Son estos movimientos los que le han significado siempre una experiencia especial. “Es un rehacer y rearmar, el cambio de lugar compone otro espacio en la mente y cuerpo, el cual expresa y piensa diferente”, plantea sobre su estadía. “La experiencia que una obra se presente fuera del país genera una visión más amplia y podemos darnos cuenta de que todo es interesante en el mundo del arte”, agrega Danisa.

La artista ha realizado más de 40 exposiciones colectivas y 5 individuales, pero sigue teniendo la necesidad de descubrir nuevas inspiraciones, buscando aprender y desarrollar nuevas técnicas para volver a replantear la imagen, reestructurarla y recomponerla. Le interesa que sus obras tengan un sentido más integrador y, a la vez, más preciso. “Siento que lo que me motiva ahora es un trabajo que apunta hacia una nueva reflexión lo que hace el quehacer más crítico y real”, apunta, y agrega que, a largo plazo, le gustaría “establecer un buen dialogo visual y sensible que me permita ver y expresar lo que me motiva como artista y ser humano”, trabajando con nuevos textos y herramientas que le ayuden a este fin.

Ⓒ Danisa Glusevic
Ⓒ Danisa Glusevic

Respecto a nuevos proyectos, la artista está en constante búsqueda de nuevos desafíos, participando en trabajos creativos para trascender con su obra y hacerla parte de estos contextos, ya sean públicos o pedagógicos. Esta extensión de su obra hacia otras disciplinas le permite acercar su arte a la vida y al movimiento, volviéndola más integradora.

“He visto mi obra a través del tiempo siendo parte de un proceso interno, así se ha vuelto quizás con más síntesis, abriendo la forma, llegando a ser mas atmosférica”.

En el último tiempo, Danisa he participado en algunas ferias y exposiciones colectivas en el extranjero, experiencias que le han significado un gran estímulo y motivación para continuar y perseverar en el desarrollo de técnicas e imágenes.

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