Alan Téllez es el único pintor independiente de México con Síndrome de Down, y por segundo año consecutivo formó parte de la exposición conmemorativa del Día Internacional del Arte, organizado por Arte y Curadoría, y que termina hoy, en Ciudad de México.
Este año lo hizo con su cuadro La Manzana, un abstracto expuesto en el Museo José Luis Cuevas, el cual representa una manzana de la cual se le extrae jugo. En México, a Téllez lo llaman El colorista de sueños, porque sus altas metas tienen a medio país sorprendido.
Pese a lo complejo que resultó su educación –a los 15 los profesores decían que no había posibilidad de que aprendiera a escribir–, Alan es un ejemplo de lucha, y eso lo demuestra el hecho de que en día su cuadro incluso esté a la venta.
Alan pisó su primera sala de arte como expositor en el Instituto Veracruzano de Cultura, donde comenzó a llamar por primera vez la atención y comenzó a ser llamado El colorista de sueños.
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